Lo mejor de Eslovenia Luna de miel

Bled es el lugar perfecto para empezar la luna de miel. Desde aquí, se puede dar un paseo en barco hasta la bonita isla y visitar una antigua iglesia. Existe la tradición de que el novio suba a hombros a la novia los 99 escalones de piedra si la pareja quiere casarse en ella. Y no olvide tocar la campana para que le dé buena suerte.

A la vuelta, puede almorzar en el Castillo de Bled, con unas vistas espectaculares, y de postre, probar alguna de las "kremšnita" locales. Pase la tarde explorando el cercano desfiladero de Vintgar para disfrutar de un día perfectamente equilibrado de naturaleza y cultura.

Visitará el menos concurrido pero igual de hermoso lago Bohinj, rodeado de majestuosas montañas en el corazón del Parque Nacional de Triglav. Puede tomar un teleférico hasta el monte Vogel, que se eleva sobre el lago y ofrece algunas de las mejores vistas de Eslovenia. También puede admirar el país desde la altura de un paseo en globo aerostático. Regresaremos a Bled, donde podrá degustar vinos locales o cenar en uno de los muchos restaurantes con encanto.

El tercer día le llevará a la pequeña pero pintoresca costa eslovena. Llegará a una de las ciudades más románticas del Adriático, Piran. Le encantarán sus antiguas murallas bien conservadas y sus estrechas calles, que susurran muchas historias del pasado. Tras una visita a pie, haga una parada en uno de los restaurantes junto al mar y disfrute de una deliciosa cena con vistas a la puesta de sol sobre el Adriático.

¿Sabía que Piran creció con la ayuda de la sal? Visitarás las salinas de Sečovlje, una de las últimas que quedan en el Mediterráneo y que aún mantienen la tradición de 700 años de producir sal a mano. Después, visite los pintorescos pueblos de las colinas de Istria. Más tarde, relájese en la animada localidad veraniega de Portorož con algunas compras y una cena para dos a la luz de las velas.

Pasaremos la mañana junto al mar, disfrutando de un delicioso desayuno. A continuación, visitaremos la cueva de Postojna y disfrutaremos de un romántico picnic con vistas al castillo de Predjama. Por la tarde, nos dirigiremos a Liubliana para cenar y hacer turismo, antes de dar por concluida la jornada.

Déjese seducir por la belleza de Liubliana, con su arquitectura de ensueño, sus encantadores cafés y su pintoresco paseo fluvial. Puedes hacer un recorrido gastronómico a pie por la ciudad y deleitarte con su cocina mientras visitas los lugares de interés más destacados, como el Castillo o el Puente Triple.

Por la tarde, elija su propia actividad: disfrute de una vista diferente del paisaje urbano desde el río Ljubljanica en SUP o en un paseo en barco, o deguste vinos. Por la noche disfrutarás de una de las cenas más singulares que existen: una cena en completa oscuridad. ¿Intrigado ya?

Después del desayuno, diríjase al castillo de Otočec y haga de su luna de miel una leyenda. Dormir en un castillo, ¡en una isla! Pasee y almuerce en el castillo. Disfrute de la tarde como desee: explorando los terrenos o relajándose en una de las acogedoras habitaciones del castillo. Y después, una cena reconocida por Michelin y una noche magnífica en un entorno de cuento de hadas digno de la realeza.

Pase la última mañana en el castillo, paseando por el recinto y disfrutando del paisaje, antes de partir hacia el aeropuerto.

Nuestras sugerencias:

• Prolongue su estancia en el castillo para recibir más mimos y tener la oportunidad de ver osos en libertad
• Descubra la vida en una granja tradicional eslovena, mientras disfruta de un alojamiento de lujo
• Experimente las maravillas curativas de los balnearios termales tradicionales del este del país